Aunque la frase "aire acondicionado" ténicamente se refiere a un aire tratado para estar frío o caliente, en la actualidad la mayoría de las personas lo utilizan solo cuando el verano viene con un calor sofocante.
Es un invento del siglo XX, pero en sus comienzos solo los ricos tenían el privilegio de verle en funcionamiento. En EE.UU. su uso es popular. Cada casa, sobretodo en los estados del sur, tienen incluído este aparato como imprescindible junto a los ya acostumbrado.
El aire acondicionado es un privilegio, pero también una fuente de gasto bastante importante. La mayoría nos damos cuenta de su importancia cuando recibimos la factura de electricidad.
La calefacción es su paralelo en los estados del norte. Cuando han caído tormentas severas que destruyen la conducción de energía eléctrica, los habitantes recolectan leña para sobrevivir a temperaturas muy bajas en invierno. El fuego de la chimenea es la versión antigua de la calefacción...pero ¿Cuál es la versión antigua del aire acondicionado?
Un amigo que vivió en Temple, Texas, dice que hace unos 25 años a 30 años los dueños de casa se las ingeniaban para mantenerse frescos en verano, a parte, por supuesto, de los baños de agua helada, utilizaban un ventilador (abanico) que se colocaba en una caja que contenía paja. La paja se mojaba y el abanico extraía el aire caliente de afuera y lo enfriaba.
No bajaba bruscamente la temperatura, pero les permitía pasar el caluroso verano de Texas.
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